Esta es la primera primavera que paso en esta ciudad y hay que reconocer algo, está preciosa. No sólo los parques han sacado todos sus verdes, blancos y rosas, un sinfín de operarios trabajan durante todo el día para cambiar las flores de todos y cada uno de los arriates y macetas de la ciudad.
Mi madre siempre ha sido muy amante de las plantas y de las flores, pero para mi han pasado más o menos desapercibidas, son bonitas y quedan bien en casa, pero reconozco que sólo suelo tener una o dos plantas... a veces ninguna.
Pero no se, quizá sea la fiebre primaveral, pero paseando por las calles de Shanghai estos días se me van los ojos detrás de las flores y de sus maravillosos colores. ¿Tantas ganas tenía de que llegase el buen tiempo? Debe ser que si!!
O quizá sea mi propia interpretación del "color block" que nos intentan meter por los ojos en todos los blogs y revistas de moda estas últimas semanas. En cualquier caso, a mi me encanta.
¿Recordáis cuando os hablé de las flores lechuga? ¿Esas que habían plantado por toda la ciudad a principio de año? Pues ya no hay rastro de ellas, las han cambiado por diminutas flores de colores.
Y me pregunto una cosa, ¿Cuál será el presupuesto que tiene la ciudad para este despliegue de color? Ya se que la mano de obra es ridículamente barata en este país, pero aún así, es una ciudad ENORME!
Sea cual sea la respuesta, he de decir que el resultado es fantástico, incluso a veces te olvidas del caos del tráfico y el ruido que te rodea.
Que bonitas, tienen pensamientos de tres colores, preciosas.
Publicado por: reyes | lunes, 04 abril 2011 en 12:05 a.m.