De camino al metro desde el teleférico había un centro comercial inmenso, que resultó ser además un outlet de primeras marcas, estaba allí enterito para nosotros, así que tuvimos que entrar para echar un vistazo.... Un par de horas después salimos con alguna que otra bolsa.
Hong Kong es un paraíso para las compras, principalmente porque los impuestos son bajísimos, nada que ver con el 18% que pagamos en España! En cada esquina hay un centro comercial, no he visto tantos y tan grandes en mi vida!
Volvimos al hotel para dejar las bolsas y entonces nos enteramos del terremoto y del tsunami que acaba de ocurrir en Japón. Nos quedamos totalmente petrificados, en ese momento daban cifras muy pequeñas en cuanto a fallecidos, no nos imaginábamos en lo que se convertiría días después. Desde aquí todo mi apoyo a nuestro país vecino.
Habíamos quedado a cenar en el Soho, pero antes queríamos ver el espectáculo de luz y de color del skyline de Hong Kong, más conocido como Symphony of Lights Show, admitamos que el nombre queda mucho mejor en inglés.
El espectáculo es diario, de 20h a 20h20 y es espectacular. Las fotos no hacen justicia, así que también grabé un video, es cortito, pero al menos os hacéis una idea.
Cuando terminó teníamos que cruzar a la isla de Hong Kong y para hacerlo, decidimos coger el Star Ferry, una de las señas de identidad de la ciudad que une Kwoloon con la isla. Es muy baratito, menos de 50céntimos de Euro! Y además es rápido, mucho más de lo que pensábamos, ni nos dio tiempo a marearnos y eso que marido estuvo a punto!!
Las vistas desde el ferry: impresionantes!
Y lo mejor estaba por llegar, habíamos llegado al corazón de Hong Kong, y un laberinto de pasarelas y calles en cuesta se abría ante nosotros.... Menos mal que habíamos salido con tiempo suficiente para perdernos, porque nos perdimos!
Cenamos con Celia y Oscar, que daba la casualidad de que también estaban en la ciudad, en un vietnamita en el centro del Soho. Estaba todo riquísimo!!
Después de cenar nos fuimos dando un paseo por las pasarelas hasta el muelle para volver a Kowloon. Una de ellas estaba llena de murales chulísimos!
Cuando llegamos al muelle el último ferry acababa de salir, así que volvimos a nuestro hotel en taxi, estábamos agotados y sólo era el primer día!!
Continuará...
Las dos últimas fotos, gentileza de chelichina :)
Últimos comentarios